Perdón por desaparecer, pero me tome unas vacaciones. En esta época del año vienen muy pero muy bien…! Como dice mi hermana, son las vacaciones para poder llegar hasta las vacaciones. Asi que prometo, de acá a fin de año hacer posteos sobre buenos lugares para irse de vacaciones, tanto de Argentina como del mundo… Elijan que el limite lo pone la imaginación y el bolsillo !
Anduve por Buzios, Brasil asi que el post de hoy lo voy a dedicar a este lugar que en total ya visite tres veces. Buzios es una peninsula a 170km ubicada en el estado de Rio de Janeiro en Brasil. La historia de Buzios cuenta que fue tierra de piratas y traficantes de esclavos. El lugar cobro notoriedad en los años 60 gracias a la famosa actriz Brigitte Bardot, quien solia visitar a su novio brasilero. Pero dado que era acosada permanentemente por los periodistas, escapaban a Buzios a descansar...
Asi que, si funcionó para ella, seguro funcionará para el mas stresado de los mortales. Si lo que buscas es tranquilidad, relajo y playas espectaculares, recomiendo Buzios.
Tiene muchas playas para conocer y cada una tiene diferencias y atracciones, pero las que mas me gustan son las del lado Norte, con agua calida, oleaje tranquilo y pasivo como una taza de te verde. Pequeñas, grandes, desiertas, más concurridas, con olas para surfear y sin olas para bucear, con arena gruesa y arena fina... Ademas solo necesitas una valija pequeñita: En este paraíso sólo necesitarás un traje de baño, un par de remeras, un pareo, protección solar, un sombrero y anteojos de sol. Ni siquiera traigas zapatos: En Búzios te compras un par de ‘ojotas’ Havaianas y con eso andas todo el día.
Para conocer sus 23 playas es recomendable arrendar los clásicos buggies a precios de 80 reales x día (no incluye gasolina) y no requieren mayor antecedentes, siendo el medio mas práctico de traslado de los turistas. Otra alternativa es la locomoción pública en pequeños micros o minivan piratas a precios de 4,5 reales por persona. También hay agencias de turismo que ofrecen paseos en barcos que van anclando en algunas playas.
Las playas más bonitas son Joao Fernandes , Joao Fernandiño, Tartaruga, Azeda e Azedinha.
Si no te gustan los tumultos, dejar atrás la gran praia de Joao Fernandes (llena de restaurantes, hoteles y chiringuitos que avanzan sobre la playa, quitándole espacio) y continúa caminando desde allí hacia tu derecha. Pronto encontrarás el acceso a Joao Fernandinho, una playa divina, más popular y mucho menos concurrida. En el acceso verás varios puestos rústicos que venden mariscos y pescados. Mi consejo: No te pierdas las ostras fresquísimas, pues son un inolvidable manjar
Esta playa preciosa lleva el nombre de ‘tartaruga’ ya que en tiempos no muy lejanos las tortugas llegaban hasta allí para depositar sus huevos. Tartaruga se encuentra en el lado opuesto a donde se encuentran la mayor parte de las playas de Buzios, sin embargo vale la pena desviarse. La lonja de arena está delimitada a un lado por grandes rocas que se meten en el mar, formando maravillosas piscinas naturales. El sitio es una pasada para los aficionados a la fotografía, ya que el paisaje es deslumbrante.
La Praia dos Ossos es la más cercana al centro, caminando 15 minutos hacia la derecha según se mira al mar. El sitio, aunque tiene sólo una pequeña lonja de arena, es preciosa, ya que está rodeado por antiguas casas con un aire portugués y en la bahía flotan veleros y yates. Los mas lindos atardeceres se ven aquí.
Durante nuestra estadía tomamos la excursión en la clásica Escuna brasilera o barcaza a Cabo Frio + Arraial Do Cabo. Paseo de día entero, visitando playas de arena blanca y mar azul, se divisan ballenas y delfines en el camino. Y en los arrecifes tortugas gigantes, las cuales no pude ver, se ve que ese día estaban con descanso.... pero igual hicimos snorkel y disfrutamos de excelentes vistas de corales y cardúmenes. Muy buena excursión a 85 Reales por persona con almuerzo incluido y bebidas libres durante el viaje (incluso caiphirina!)
Por la comida, despreocúpate y goza: Aunque estés en una playa perdida, siempre aparecerá un vendedor con ostras frescas, ‘siris’ (cangrejos) recién asados, ‘milho quente’ (mazorca de maíz caliente) y zumo de coco, que se bebe, naturalmente, del mismo coco. A la orilla del mar como en Joao Fernandez un plato básico + bebida en lata y caipirinha, 35 reales por persona. Y casi es obligado ya que el almuerzo te da derecho a utilizar las sombrillas y sillas a orillas de la playa.
Búzios es absoluto relax, si eso es lo que te gusta, pero también es la noche que se alarga entre caipirinhas y brochetas de camarones en los bares de Rua das Pedras. Aquí se encuentran locales y tiendas de las mejores marcas brasileras e internacionales.
Y, como todo Brasil, Búzios es samba, bossa y batucada. Aunque no la escuches, la música está en todas partes. Los brasileños la llevan en las venas: Así caminan, así hablan, así te reciben, así viven... Como si una eterna y dulce samba habitara en sus corazones que contagia y energiza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Dejame tu comentario